Yo siempre me debato sobre esa dicotomía: tristeza/felicidad. Primero me dicen: lo más importante es ser feliz. Y yo me respondo (con una pregunta): ¿pero eso no es egoísta?, porque el hombre ha buscado la felicidad a toda costa, aunque sea efímera. Durante mucho tiempo defendí esa premisa: al mundo no venimos a ser felicies, algunos la consiguen, y otros no. Sin embargo, hay cosas que me hacen cambiar de parecer. Entonces seguiré con mi debate.
7 Comments:
Lo siento, pero el documental What the blee do we know se te adelantó a proclamar la premisa.
Si dicha premisa es verdad [uno se vuelve adicto a sus emociones], también la felicidad lo es.
Cuestión de enfoques.
Yo siempre me debato sobre esa dicotomía: tristeza/felicidad.
Primero me dicen: lo más importante es ser feliz. Y yo me respondo (con una pregunta): ¿pero eso no es egoísta?, porque el hombre ha buscado la felicidad a toda costa, aunque sea efímera.
Durante mucho tiempo defendí esa premisa: al mundo no venimos a ser felicies, algunos la consiguen, y otros no. Sin embargo, hay cosas que me hacen cambiar de parecer. Entonces seguiré con mi debate.
Sí, las emociones son adictivas. Helen Fischer se le adelantó a todo el mundo en 1992.
Al mundo se viene a sobrevivir. Ya cambiamos las lanzas por tìtulos universitarios, pero es lo mismo.
Sobrevivir para ser (in)feliz... eventualmente.
Me gusta recalcar lo obvio.
:D
Una palabra: Prozac :)
Para curar una adicción basta con tener otra.
Hiperikam, Paxil...
quiero una adicción que de lo físico se vuelva química, no al revés.
¿dónde encuentro eso? xD
Publicar un comentario
<< Home